(1950-2019)
Nació en Concepción Santander el 9 de febrero de 1950, se graduó como bachiller del Colegio García Rovira; cursó sus estudios de pregrado en la Universidad Industrial de Santander (1967-1974), posteriormente se especializó como pediatra en la Universidad de Antioquia (1976-1979) y obtuvo su segunda especialización como neonatólogo en la Universidad Militar Nueva Granada en 2008. Desempeñó su ejercicio profesional como pediatra y neonatólogo en su consultorio particular y en la Clínica Metropolitana y Chicamocha; de igual forma, laboró como docente asistencial en el Hospital Universitario de Santander y en el Departamento de Pediatría de la UIS al servicio de recién nacidos.
Se destacó como un gran maestro de la pediatría y de la neonatología desde el 1 de agosto de 1979, alcanzando la categoría de profesor Asociado de planta de la Universidad Industrial de Santander (UIS), ocupando allí además el cargo de director del Departamento de Pediatría en el período 1980-1981, también fue el coordinador del Comité Científico del Congreso Colombiano de Pediatría que se llevó a cabo en Bucaramanga en 1984.
Fue una persona de mente inquieta, siempre actualizado, amante de la tecnología y docente brillante muy querido por todos sus alumnos. Autor de numerosas investigaciones y publicaciones, quien representó en múltiples instancias nacionales e internacionales al Departamento de Pediatría de la UIS.
En los últimos años se desempeñó como coordinador de la sección de cuidado básico neonatal del Departamento de Pediatría de la UIS, cumpliendo labores docente asistenciales de la mano de residentes, internos y estudiantes de pregrado. Además, fue pionero en el uso de la simulación como herramienta para la enseñanza de la neonatología en el Departamento de Pediatría de la UIS. Entre el 25 al 27 de abril de 2019, se realizaron en su honor las XXIII Jornadas Pediátricas de Santander.
Falleció el 8 de diciembre de 2019. El Departamento de Pediatría manifiesta el más profundo sentimiento de pesar por su fallecimiento y se solidariza con su familia, con la comunidad santandereana y de la UIS en donde gozaba del más alto aprecio.
A pesar de su ausencia física las enseñanzas y el ejemplo de vida que transmitió perdurarán por siempre en nuestra memoria.
Paz en su tumba.
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