Published 2018-10-22
How to Cite
Abstract
El mundo es como es, pero podría ser de otra manera. A menos que creamos en el destino, nada más en nuestra vida personal somos conscientes de que ciertas decisiones que tomamos en determinadas circunstancias, o de que una determinada coincidencia en un momento dado, cambiaron por completo el rumbo de nuestras existencias. Por ejemplo, a alguien lo dejó el transporte de su empresa que lo recoge cada día, por lo que hubo de tomar un autobús de servicio público en el cual se conoció con quien sería su esposa. Por supuesto, es imposible saber qué habría sucedido si ese día no se hubiera estropeado el despertador, pero es absolutamente claro que, de no haber sido así, los hijos que tuvo con su esposa, y los nietos, etc., no habrían existido jamás. En cambio, habrían probablemente nacido, de otra esposa, otros hijos y otros nietos que nunca tuvieron la oportunidad de salir de la nada.