Published 2003-07-25
How to Cite
Abstract
RESUMEN
La independencia de los dominios españoles en América no fue el resultado de una revolución social que hiciera tambalear las bases económicas y sociales del orden colonial. Al contrario, el movimiento independentista fue principalmente de carácter político y estuvo dirigido por sectores sociales fortalecidos durante el siglo XVIII gracias a las políticas económicas introducidas por los Borbones, que constituyeron lo que Pierre Vilar llama "la reconstrucción del pacto colonial" (75). Es notorio, sin embargo, que dichos sectores sociales no mantuvieron con el estado borbónico una relación sencilla. Todo lo contrario, pese a ser favorecidos por su política económica, se vieron negativamente afectados por la estrategia política borbónica que exigía un mayor control desde el centro sobre toda la administración colonial que, por lo tanto, entraba a depender de mandatarios de absoluta confianza de la corona, cerrando las puertas del poder político a los naturales, y favoreciendo a funcionarios peninsulares, a quienes se les impuso innumerables limitaciones en sus posibilidades de actuación, tanto política como personal, a fin de evitar cualquier vínculo estable con la sociedad local. En breve, esta estrategia política convertía a los sectores dirigentes criollos en ciudadanos de segunda clase. Es esta contradictoria relación con la España Imperial la que va a marcar el desarrollo ideológico de los sectores dirigentes americanos a lo largo -pero especialmente en la segunda mitad- del siglo XVIII, hasta culminar en la formulación de la vía independentista como única posibilidad de desarrollo de sus propios intereses, tanto económicos como políticos.